En el Juzgado 1o. de Paz de Santa Ana, fue acusado este martes el juez presidente del Tribunal Segundo de Sentencia de esa ciudad, Carlos Alfredo Alvarado Rodríguez, a quien la Fiscalía señala de violación agravada de un menor de edad, junto al funcionario judicial es procesado Javier Eduardo Arévalo Toledo, a quien se le acumula también el delito de otras agresiones sexuales.

Carlos Herrera, jefe de la oficina fiscal de Santa Ana, dijo que han pedido que sigan en detención provisional por existir suficientes indicios de los ilícitos cometidos en perjuicio de la víctima que tiene régimen de protección y cuyo testimonio incrimina a los dos imputados.

El Ministerio Público, tuvo conocimiento del hecho el pasado 18 de junio a eso de las 9:00 de la mañana cuando se le informó que la Policía Nacional Civil (PNC) había capturado al juez porque había una víctima de violación que lo estaba señalando de haberlo abusado sexualmente.

El menor en su denuncia ha manifestado que cuando se encontraba en la gasolinera La Heroica, de Santa Ana, el juez y su acompañante lo invitaron a ingerir bebidas alcohólicas manifestándole que lo van ir a dejar a su casa.

La víctima asegura que cuando se suponía que iban a dejarlo a su residencia se desviaron de la ruta y lo llevaron hacia otro lugar. “Según lo que manifiesta la víctima hubo una acción tanto de Arévalo Toledo donde supuestamente sujetó a la víctima y supuestamente la violación fue cometida por el señor juez”, expresó Herrera.

Tras ser abusado el menor se fue del lugar y se dirigió a la Policía a poner la denuncia, con la información proporcionada por la víctima las autoridades de la PNC de la Delegación de Santa Ana, fueron a buscar a los imputados para capturarlos por el supuesto delito de violación.

Al estar detenidos, las autoridades hicieron una inspección en el lugar de los hechos lo cual concuerda con lo dicho por el menor, además al estar capturado el juez y su acompañante, el menor los identifica como sus agresores.

La Fiscalía General de la República, pidió también al Instituto de Medicina Legal que hiciera un examen a la víctima y en el peritaje forense se confirma que el menor había sido violado.

Ese peritaje de genitales practicado al menor ha sido incorporado al expediente y presentado como prueba que vincula a los procesados en la supuesta violación sexual, un delito grave que podría dejar a prisión al juzgador